Desde sus inicios, las inmobiliarias siempre habían tenido una oficina en físico donde hacían todas sus gestiones ‘face to face’. Esto, cuando todavía el público se adecuaba a las prácticas tradicionales de compra y venta. Sin embargo, debemos entender que en la actualidad, con la llegada de la tecnología, los hábitos del consumidor han cambiado exponencialmente.
Ahora, los compradores recurren cada vez más a Internet para comprar casas.
Entender que esto forma parte del proceso evolutivo del sector –y del mundo en general- es clave para surfear la ola de la competencia.
Sabemos que la digitalización ha impactado a las empresas tradicionales, pero no hay que verlo como una amenaza, sino, más bien, como un impulsor para seguir creciendo.
Cómo funcionan las inmobiliarias 100% online
En estos tiempos, y en especial en este 2020 de confinamiento, gran parte de los trabajos que comúnmente hacíamos en una oficina, se han ido adecuando al modo remoto. ¿Y qué es el modo remoto? Fácil: el trabajo desde la comodidad de tu hogar.
De por sí, esta es una metodología que venía in crescendo por cuestiones de rentabilidad, comodidad y practicidad; y ha sido confirmado que las ventajas o los resultados positivos son reales. Así que, de entrada te decimos que lo primero que debes tener claro es que una inmobiliaria online no quiere decir -jamás y nunca- menos profesionalismo. ¡Quítate esos prejuicios!
Ahora sí, vayamos al grano. Las inmobiliarias online funcionan bajo plataformas digitales que nos ofrecen herramientas o servicios capaces de optimizar nuestra gestión al máximo. Estas han sabido digitalizar y automatizar algunos procesos tradicionales, por lo que suponen una reducción de tiempo y costos.
El abanico de opciones que nos da el proptech es tan grande que, básicamente, no te hace falta regresar a las prácticas tradicionales para que tu trabajo sea igual de exitoso.
Apostar por la tecnología siempre nos lleva a un paso más adelante; pero, sin duda, el valor agregado real está detrás de una pantalla, en la calidad nuestro trabajo y en el compromiso que le imprimimos.
Lee también Proptech: La transformación del sector inmobiliario
Dicho esto, ¿debemos considerar a las agencias tradicionales como competencia?
¡Claro que sí!
Aunque no trabajemos bajo los mismos parámetros, pescamos en el mismo mar. Es por eso que hacemos tanto énfasis en las estrategias de captación.
Ventajas de las inmobiliarias online
Partiendo de la misma premisa con la que iniciamos este tema –que los hábitos del consumidor y sus necesidades han cambiado-, podemos decir que las agencias inmobiliarias han tenido que cambiar su enfoque. Algunas siguen navegando entre las aguas del mundo offline y online a la vez, y otras han migrado totalmente a la digitalización. De esas nuevas necesidades surgió el marketing inmobiliario, que nos trajo beneficios indiscutibles:
El uso de plataformas digitales permite tener un mayor alcance que al que pueden llegar las inmobiliarias tradicionales.
Tanto las páginas web, como las redes sociales, buscadores y demás plataformas ofrecen servicios de análisis y optimización, que jamás vamos a encontrar en el método tradicional –o al menos no tan rápido y certero-.
Las formas de promocionarse ya no son las mismas que hace años atrás, por ende, la dinámica del mercado se ha visto afectada. Mientras que antes se hacía por periódico, o a lo mucho, canales de televisión o radio; ahora se hace a través de redes sociales, anuncios en websites y correo electrónico.
Al ser un campo novedoso, nos empuja a estar constantemente actualizándonos, estudiando, y capacitándonos para afrontar cada reto que va surgiendo en el camino. Nos hace salir de nuestra zona de confort.
Te puede interesar: ¿Instagram para inmobiliarias?
Podemos tener un retorno de inversión gracias a los diferentes y variados servicios que nos permite ofrecer el mundo digital, más allá de la mera compra y venta de un inmueble.
Permite que la calidad de los interesados en un inmueble sea mucho más afinada. Se puede ahorrar tiempo y dinero cuando se conoce a los prospectos realmente interesados en finiquitar el negocio. Es menos probable andar “lanzando flechas”.
Mientras que las inmobiliarias tradicionales suelen trabajar “gratis” y solo perciben sus honorarios cuando se cierra la negociación; en algunas inmobiliarias web se trabaja bajo otra estructura de pago, según los servicios, asesorías o una cantidad fija al inicio del proceso, es decir, aunque no vendan la casa. Es decir, la paquetización es diferente y las tarifas también lo son.
Te ahorras gastos de oficina, condominio, mobiliario, limpieza, facturas de luz y agua, seguridad, etc. Tu punto de trabajo es tu propia casa.
Posicionamiento
Con todas las ventajas que tienen las inmobiliarias online llegamos al posicionamiento, un punto clave para cualquier negocio de esta era.
En estos tiempos pareciera que lo que no está en internet, no existe. Por eso, una estrategia de marketing adecuada, dirigida a los canales digitales ideales para la promoción del sector, será decisivo para alcanzar el éxito. Tener presencia y lograr la recordación en tus clientes supondrá un gran cambio. Además, tienes la posibilidad de enfocar tus objetivos hacia tu público objetivo de una forma más directa y segura, ya que las plataformas cuentan con inteligencia artificial para realizar ese trabajo.
Credibilidad
A veces las personas tienden a caer en el error de pensar que una oficina –o tienda física- le da mayor credibilidad a un negocio por el hecho de estar en un local bien ubicado. Sin embargo, a un comprador potencial realmente no le importa qué tan bien se vean las oficinas de la agencia inmobiliaria, sino que pueda conseguir lo que busca al mejor precio y con un proceso cómodo.
Si tienes dudas, fíjate en los portales inmobiliarios que conoces. Ninguno de ellos tiene una oficina de atención al cliente y sin embargo, sus números en ventas son elevadísimos; cada día cuentan con más clientes potenciales.
La credibilidad, entonces, no la determina un lugar, sino lo que tienes para ofrecer de la forma correcta. Se trata del branding que le hagas a tu negocio; de invertir en tu marca y que la gente te reconozca por tus buenas prácticas. Transmite confianza, demuestra tus experiencias y sigue una estrategia de marketing que te posicione de forma consistente dentro del mercado.
Al final, sean inmobiliarias offline u online, se mantendrán en el mercado las que sepan dar un valor agregado, un servicio de calidad y encuentren su diferenciación del resto. Más allá de las metodologías o plataformas, lo que prevalece es una gestión que hable por sí sola.