Para nadie es un secreto que, la moda, la comida y los inmuebles entran por los ojos. Saber qué se ajusta a tus necesidades o con qué te sentirás más cómodo, son piezas clave al momento de la decisión de compra. Por eso, crear una ventaja por encima de tu competencia implica mostrar -y mostrar bien-.
El gran problema dentro del sector inmobiliario es que, por lo general, los agentes no están preparados para llevar a cabo esta misión, o al menos no de la forma adecuada para conseguir resultados exitosos.
La fotografía inmobiliaria no es tarea sencilla, pero tampoco es imposible y puede marcar una gran diferencia.
Si tienes un inmueble soñado, pero las fotos están oscuras, no se aprecian bien los espacios o se ve desordenado, simplemente no llamarás la atención de tus clientes potenciales.
¡Así que no subestimes el poder de la fotografía inmobiliaria! Allí puedes encontrar tu punto a favor o el descarte total.
Lo que no se exhibe, no se vende
Cuando un cliente potencial acude a ti, lo primero que ve son las fotos de los inmuebles que ofreces. En primera instancia no detalla los metros de la vivienda, ni el número de habitaciones, o si tiene piscina y jardín; solo se imagina cómo sería vivir ahí, aún sin saber si le conviene o no. Es como una acción casi inconsciente, va directo a fijarse en lo que ofreces. Por tal motivo, el primer gancho en la etapa de captación son unas fotografías atractivas y de calidad.
Veámoslo así: cuando una persona navega por internet buscando casas, se paseará por cientos de opciones, una detrás de otra, a gran velocidad. No puedes confiar en que le dedicará demasiado tiempo por cada vivienda que consiga, así que todo pasa muy rápido. Tras un par de horas viendo y buscando, todas le terminarán pareciendo igual, entonces… ¿cómo harías para que se decante por tus ofertas?
Durante el poquísimo tiempo que le tome revisar tus inmuebles, el único elemento capaz de captar su atención es el material visual que le presentes, ahí entrarás en tu minuto de gloria, por eso la imagen destacada debe hablar por sí sola.
Recuerda: puedes tener la mejor cartera de inmuebles, pero si no sabes exhibirlos, estarás echando tu trabajo por la borda.
Lo que debes destacar
En tu labor es vital que muestres la mejor cara del inmueble que vendes. Para que esto ocurra, debes hacer que tus ofertas se vean atractivas destacando:
- El orden: a nadie le gusta ver espacios desorganizados, ¡ni siquiera a las personas desordenadas! Esto crea estrés, así que todo debe estar en su santo lugar.
- La limpieza: al igual que el punto anterior, mostrar un inmueble pulcro es clave y habla bien tanto de los dueños como de ti como asesor. El cuidado por los detalles tiene un valor incalculable.
- La realidad de la propiedad: sabemos que debes mostrar las partes más ventajosas de la vivienda, pero tampoco debes caer en los engaños. Los clientes potenciales deben estar al tanto de la realidad puesto que, si deciden comprar o alquilar, no se llevarán sorpresitas indeseadas.
- La funcionalidad y comodidad del espacio: el sueño de todo adulto es gozar de espacios cómodos, útiles y bonitos. Aunque no lo creas, psicológicamente esto influye muchísimo en el desempeño o la productividad diaria.
- La iluminación: en tus fotografías es sumamente importante que se vea claramente lo que estás presentando. Apóyate en la luz natural.
Como valor agregado, puedes utilizar elementos decorativos que generen una sensación de armonía. ¿A quién no le gusta saber que sus espacios además de útiles son agradables?
Partes del inmueble a fotografiar
Muchas veces, cuando llegamos a la locación nos preguntamos: ¿y ahora por dónde empiezo?, ¿qué debo mostrar y qué no?
¡Fácil! Para empezar, debes saber que hay espacios que llaman más la atención que otros; allí es donde te tendrás que enfocar en primer lugar. Por ejemplo:
- La cocina y el comedor: son los puntos de encuentro más importante del hogar. Diariamente las personas pasan mucho tiempo en estos espacios y emocionalmente tienen gran peso, así que debes explorar los mejores ángulos, los elementos que tienen y resaltar detalles que transmitan justo la esencia o la razón de ser de estas áreas, con mucho estilo.
- Jardines o áreas comunes: la gente necesita –y da mucho valor- a los espacios para el esparcimiento y relajación. Muestra la amplitud de los exteriores y las bondades que ofrece, sea una vivienda privada o un conjunto residencial.
- Habitaciones y baños: Un básico, sin duda. Estas áreas son en sí mismas un templo dentro de cada hogar. Los lugares más sagrados que encierran la privacidad de cada individuo. Nadie querrá vivir en un sitio donde no se sienta cómodo en su propio cuarto o baño. No hay mucho que explicar acá…
¡Ojo! Ten en cuenta que estas son las principales áreas a fotografiar, pero no te debes olvidar del resto. Solo es cuestión de jerarquización.
Recomendaciones
Lo primero que debes hacer es organizar tus ideas y tu plan de acción por etapas.
Pre producción:
- Prepara la sesión de fotos con antelación, preferiblemente con unos días de margen. Define por dónde vas a comenzar y cuáles serán los próximos pasos.
- Asegúrate de que la limpieza esté hecha como debería para el día de la sesión. Ten en cuenta que no todas las personas son iguales y lo que para algunos es orden, para otros no. Tu ojo, al no convivir en ese entorno, estará preparado para darle el visto bueno.
- Practica el home staging. Prueba con elementos decorativos que realcen los espacios porque (siendo sinceros) no todo el mundo cuenta con una decoración de revista para sacarle el mejor partido a sus inmuebles.
Si te interesa saber más sobre este tema, lee: Home Staging para vender tu inmueble más rápido
Producción:
- Utiliza una buena cámara (o en su defecto, contrata a un fotógrafo que sepa lo que hace).
- Apóyate en un trípode para evitar tomas movidas.
- Evita las fotos a contra luz, trata de que salgan lo más claras posible.
- Revisa el material por cada espacio que vayas tomando, así evitarás llegar a casa y encontrarte con que ninguna foto sirve.
Post Producción:
- Haz un retoque fotográfico, esto siempre es necesario. Edita, corta o amplía según tus necesidades.
- Ajusta brillo y contrastes.
- Realza los colores.
- Opcional: usa marca de agua si tu agencia lo solicita.
Y por último, una recomendación más: muestra el sector. Una de las claves para que un cliente potencial tome la decisión de comprar o alquilar tiene que ver con la ubicación del inmueble. Explóralo, busca las ventajas del sitio, fotografíalo y déjaselo saber en tu oferta.