El tour virtual 360: Una experiencia inmobiliaria diferente

El mercado inmobiliario –o mejor dicho, las prácticas- se han revolucionado con la tecnología. Cada vez somos más conscientes de las bondades que nos ofrecen los nuevos aparatos electrónicos, acompañados de softwares y un poquito de creatividad. Es el caso del tour virtual 360º.

Cuando hablamos de un tour virtual, podemos inferir que la experiencia puede ser cercana a la que tenemos cuando nos montamos en los simuladores de los parques de diversiones: una pantalla con realidad virtual. Sin embargo, está mucho más apegado a la realidad.

Si tú como agente inmobiliario aún no conoces esta herramienta, este es el momento de montarte en el viaje al presente. ¡Ahora las cosas son mucho más fáciles!

¿Qué es el tour virtual?

Lo primero que debes saber es que el tour virtual es un recorrido que tus clientes potenciales pueden hacer por todo el inmueble que les estás ofreciendo, de manera inmediata, cómoda y segura, a través de una pantalla.

Ya no requieres de citas y todas las complicaciones que conlleva hacer una visita oficial a la propiedad que estás tratando de vender o alquilar. Simplemente, desde tu propia oficina puedes acompañarles en su recorrido sin que ni tú ni ellos tengan que asistir presencialmente al lugar.

Partiendo de este punto, estarías simplificando muchísimo el proceso de selección, ya que el objetivo de esta herramienta es, precisamente, optimizar tu gestión y los tiempos, a la vez que aprovechas las oportunidades que la innovación te brinda.

Recuerda que mientras más adelante vayas de tu competencia, mejores resultados puedes obtener.

¿Qué se necesita?

Los tours virtuales no son para nada complicados de hacer, solo necesitas un poco de práctica y unos buenos instrumentos.

Para empezar, lo que debes tener es una cámara 360º. Aunque las fotos son como cualquier otra (generalmente en formato jpg), la particularidad de esta cámara es que envuelve todo el entorno. Es decir, actúa como la captura de las fotos panorámicas pero da la vuelta completa hacia los lados, arriba y abajo –de allí viene su nombre-. Por supuesto, el material tiende a ser más pesado porque capta mucho más el detalle pero en líneas generales no es nada del otro mundo.

La gran ventaja de contar con una cámara 360º es su practicidad; son pequeñas, y tienen conexión a Bluetooth o Wifi para que el traspaso de imágenes sea casi inmediato.

Por otro lado, también necesitarás un software especializado. A diferencia del video inmobiliario, con el tour, tus clientes sí tienen la posibilidad de interactuar directamente. Pueden moverse por la foto como si estuvieran en el lugar, hacer zoom, cambiar de planos y utilizar una vista 3D. Es por ello que el software juega un papel fundamental para convertir esta ventana en una experiencia muy realista.

¿En qué te favorece?

Los tours virtuales son unos de los servicios más atractivos en el mundo inmobiliario actual. Estos suponen tanto para ti, como para el cliente potencial, un ahorro de tiempo –y el tiempo es dinero-.

Desde el punto de vista del marketing, puedes sacarle provecho como una herramienta poderosa y super competitiva; te posiciona por encima de aquellas inmobiliarias que solo disponen de fotografías para mostrar sus ofertas de inmuebles. Es un valor agregado a tu gestión.

Además, gracias a la digitalización, el contenido que presentas mediante esta práctica le permite a tu cliente tener perspectivas.

Entre el 50 y el 60% de las visitas presenciales a inmuebles, no son efectivas y esto se debe a que -por lo general- en el momento de la cita el cliente no tiene todavía muy claro lo que busca; así que lo que hace es entrar en un proceso de descarte, más que de selección en sí.

Tomando en cuenta ese dato, no estamos diciendo que nos olvidemos de las visitas físicas; sino que es beneficioso apalancarse en los recorridos virtuales previos para evitar pérdidas de tiempo y desplazamientos innecesarios a los inmuebles. De esta manera facilitarás el proceso de selección final.

Lee también: El video inmobiliario: A un paso más cerca de tus clientes

Por otro lado, tienes la oportunidad de construir un puente de confianza puesto que el usuario puede pasearse por la vivienda, ver acabados, conocer todos los espacios e incluso, solicitar cambios o mejoras. Sentirse en la posibilidad de evaluar y ajustar a su gusto es un acto que los clientes valoran mucho.

Otro recurso favorable que ofrece el tour virtual es la recreación en 3D con realidad virtual; si hablamos de una obra gris, el cliente puede ver cómo quedaría una vez que esté listo, para poder tomar una decisión. Además, se pueden evitar gastos importantes si los cambios se atajan a tiempo. Por ejemplo: puede solicitar cambios incluso antes que estén materializados; sobre todo en temas de planificación de servicios eléctricos y tuberías de agua.

Adicionalmente, otro atractivo de esta herramienta es la integración de Google Maps.

¿Todavía te queda alguna duda?

En definitiva, el tour virtual representa una amplia solución en el sector inmobiliario que conjuga la flexibilidad de horarios con la medida justa de tecnología para hacernos la vida más fácil tanto a los agentes como a los clientes.

Nuestra recomendación de recursos

Llegados a este punto, no nos queda más que terminar de guiarte en la selección de los instrumentos a utilizar para empezar a usar el tour virtual como parte de tu estrategia inmobiliaria. El resto es cosa tuya, recuerda que la práctica hace al maestro.

Cámaras:

Samsung Gear 360 (edición 2017) cámara de vídeo 4K de 360°

GoPro MAX – Cámara impermeable 360

Softwares:

Roundme Tours

Floorfy

3D Vista Tours

Kuula

Matterport

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